HISTORIAS DE LA confinación DÍA 15 + 7

César Farrés

Finalmente me he rendido a la tecnología. Sino estás fuera.

Lo más habitual para algunos privilegiados, es el desconocimiento total para mí.

Tienes que tener la aplicación, .. es muy sencillo, .. es maravilloso, .. al final nos veremos todos, es la bomba !!!, blablalbá, blablabla ... Vale, vale de acuerdo ...

La reunión fue a las 4 de la tarde, un poco temprano, dado que era domingo y a pesar de todo, aún conservo el espíritu "siestero" del día del Señor.

Me hizo pensar un personaje también convocado a esta reunión. Insistía mucho en que yo hiciera acto de presencia. Es muy fácil ya verás .., es guay ... qué? ...

Previendo las posibles insistencias, ya tenía la App descargada y el password no me explico como, también.

En la pantalla aparece un personaje con rasgos, (interpreto) ecuatorianos, o bien podría ser un moreno confinado por el sol, con el que me intento comunicar.

Hola, hola !!! .. interpelo animadamente. Menospreciado en pantalla entendí que aquel Sr. y yo no nos habíamos visto nunca.

Me habían dado mal algún dato de conexión, o tal vez sería una broma de mi querido amigo, siempre dispuesto a lo que más nos gusta?

Pues no, todo era correcto.

Empezaron a aparecer caras y más caras totalmente desconocidas para mí. Entre ellos se comunicaban cordialmente, la niña pequeña ya había empezado a caminar, una chica muy agradable, me pareció entender que vivía en Suiza, el abuelo a el que saludé cariñosamente y que fui correspondido, por un tema de educación o de confusión, irradiaba felicidad, al ver a toda la familia, supongo, junta en aquella explosión de comunicación tecnológica. Hay que decir por suerte, en esta ocasión, mi pantalla tiene un telo blanquecino que no permite un reconocimiento fluido de mi cara. Personajes de todas las edades, hablando en catalán, nuestro culto lenguaje, se felicitaban y se preocupaban recíprocamente de la salud general del grupo, de repente el convocante apareció fugazmente en mi pantalla, grité fuerte Jaume !!!, y nada . Me sentí como "octopus in a garaje"

En un recuadro de la pantalla me pareció reconocer a una amiga que supuestamente debería estar conectada y que sería mi salvación.

Estás más joven que nunca, el confinamiento te está sentando muy bien !!!!

La respuesta fue clara contundente y concreta. ¿Quién eres? Quizás te confundes de chat. Pensativamente seria, me preguntó: ¿CONOCES AL DEL GATO?