Una mesa para cuatro
JOSÉ Mª MILÁ
Creo llegado el momento de reservar mesa para cuando esto termine. No sabemos nadie cuándo llegará ese anhelado final, ni tan siquiera sabemos cuán largo será el final, ni cuándo consideraremos que el final será el final que nos gustaría. Pero llegará.
Y para entonces lo primero que deberemos hacer todos es ir a comer o cenar a Il Giardinetto a celebrarlo. Y a agradecer a Poldo la feliz idea de mantenernos unidos con nuestros escritos. Poldo siempre uniendo a los amigos, conocidos y desconocidos. Nos reúne en Il Giardinetto cuando está abierto o ahora desde casa con nuestras “Historias de casa”. ¡Fantástico!
Pero creo llegado ese momento por nosotros y por Il Giardinetto, os animo a hacer lo mismo, reservar mesa para cuando sea. Me muero de ganas de la merluza frita, de los espagueti Sofía Loren, de las alcachofas fritas. De los Carbonara, que si aquel día no hay, los hacen; Angel me guiña un ojo y los trae, recién hechos, secos, impecables. Qué ganas de volver a Il Giardinetto. ¿Y el Finaletto…?
Que sí, que Poldo estará encantado de saber seguro que para cuando reabra tenga problemas de exceso, dónde pongo a tanta gente, tendremos que ceder y hacer cola o buscar otro día, lo siento, haberlo reservado con tiempo…
Yo, por si acaso, Poldo. Por favor, una mesa para cuatro…